Posted by :
Manuel Rodriguez
29 sept 2011
Con la mochila cargada con más de veinte años de experiencia,Javier Madero arribó a la institución Gasolera este año, con la idea de lograr el ascenso a Primera A. Gracias al respeto y la confianza que infunde y que tiene por los demás, se convirtió en el capitán de esta aplanadora, que no para de cosechar triunfos y lidera invicta la zona 1B del la Primera B de Capital Federal. Siempre humilde y gesticulador (como cuando se encuentra en el banco de suplentes) el gran capitán de la Primera División habló con Última Pelota sobre el presente y el futuro del equipo y el básquet del el club.
Cuáles son las claves para que estén pasando este buen momento?
Fundamentalmente la calidad del
equipo de trabajo que se armo, tanto jugadores como cuerpo técnico, Y en
segundo lugar, pero no menos importante, la seriedad con que se tomo el
proyecto por parte de todos.
A pesar de este gran período, los últimos partidos no están en buen
nivel, igualmente logran la victoria…
Logramos la victoria justamente
por la calidad de jugadores que tenemos
que, en momentos clave, te resuelven el partido.
En cuanto a la baja del nivel
hay varias cuestiones. Los rivales nos están planteando defensas zonales y nos
cuesta resolver porque no tenemos ningún tirador natural, sobre todo ahora que
no contamos con Fernando Cartabbia. Independientemente de eso, no estamos
pudiendo romper las defensas sin el tiro y eso si hay que trabajarlo.
De local, nos está pesando un
poco la cantidad de gente. Aumenta la ansiedad de algunos de nosotros que
quieren tirar mucho, anotar, y eso termina jugando en contra porque dejamos de
jugar en equipo. La realidad es que de visitantes estamos jugando mucho mejor
que en casa.
¿Ganar a la última fecha a Banco Nación (su más cercano perseguidor)
fue decisivo?
Sí, porque nos da la
tranquilidad de que si perdemos seguimos punteros. Me hubiera gustado ganarlo
más cómodos, no pudimos manejar el encuentro a pesar de que lo ganamos. Tuvimos un primer tiempo malo, pero nuestro
tercer cuarto fue excelente, permitimos nada más que seis puntos y pasamos al
frente con una buena diferencia y en el cuarto final volvimos a tener
problemas, hasta el cierre, que lo destrabamos defendiendo fuerte y atacando
con tranquilidad.
Contar con jugadores como Alejandro Eiguren o Matías Fernández, que
vienen de jugar en niveles más altos, ¿les da una ventaja?
No sólo ellos dos jugaron en
niveles superiores. La diferencia que hacen ellos es que vienen de jugar en Liga
B (NdR: tercera categoría nacional) el último torneo. Obviamente son un plus.
Matías es un pívot que lo quiere cualquier equipo de Capital e incluso tuvo ofertas
de Liga B y TNA. Alejandro está por
encima de cualquier Base de Capital de cualquier nivel, es de Liga Nacional, no
solo por su juego, sino por su cabeza que esta siempre pensando en el equipo,
dentro y fuera de la cancha, es fundamental en este y en cualquier equipo que
él juegue.
¿Cuál es la fortaleza máxima de este equipo?
El capitán vive todos los partidos con intensidad. |
Las virtudes de este equipo son
la calidad de jugadores, la intensidad con la que jugamos, la seriedad con que
asumimos el proyecto. También físicamente estamos en un nivel superior y eso se
nota. Además tenemos un plantel largo, en el sentido que, por la reglamentación
que impuso la federación que obliga a tener dos Sub 23 y cuatro Juveniles,
contar con buenos sub 23 y con Julián Aguirre, que es juvenil, juega de titular
en Primera y es figura, nos facilita la rotación que hace que al final del
partido ganemos por cansancio.
El haber perdido un sólo partido en el año,¿ se convierte en una
motivación o en una presión?
En una motivación, la realidad
es que yo no quiero perder nunca, entonces no me pesa
El invicto en la segunda ronda no pesa…
Al contrario, para mí sería
motivo de orgullo salir campeón y lograr ascender, manteniendo el invicto de
local. De hecho, como viene el tema, si no nosotros seguimos sin perder de
local, ascendemos, porque vamos a definir todos los playoffs en esa condición.
La presión la tienen que tener los equipos contra los que jugamos.
¿Qué te hace sentir que tus compañeros siempre remarquen tu trabajo
como capitán y el respeto que te tienen?
Me hace sentir muy bien. Llegue
este año al club y no venía con muy buenos antecedentes, porque siempre juegue
en contra y jugando soy bastante áspero. Así y todo me propusieron como capitán
y me respetan mucho.
Hace 20 años que juego en primera y esto me
nutrió de mucho conocimiento y tengo una idea de cómo funciona o no un equipo. Para
mí, lo más importante es estar siempre positivo y sumar. Las personas que son
referentes en grupos, con sus actitudes, tienen mucha influencia en los mismos
y por eso hay que pensar en positivo y ser un ejemplo de trabajo. Siempre siendo
humilde y sin llevarse a nadie puesto, porque acá nos salvamos o nos hundimos
todos, parecen frases hechas, pero es así.
Otra frase hecha es que un grupo es más que un equipo. En la fórmula,
¿Cuánto hay de equipo y cuanto de grupo?
Nunca pensé en la fórmula, pero lo que puedo decir es que
es fundamental la calidad de personas que conforman el grupo.
Refiriéndome a Temperley en
particular, el principal responsable del éxito del grupo es Lucas Viva, que es
el que mayor incidencia tuvo en los integrantes del grupo, más que nada con los
nuevos, ya que muchos hemos jugado con él.
Uno de los principales secretos
del éxito es que, gracias a la calidad de personas, se formó un grupo de amigos y
eso nos hace más unidos y no da lugar a peleas y conflictos. Yo llo marco con
dos ejemplos puntuales: La selección argentina de básquet y la selección
uruguaya de futbol. No se pelean adentro de la cancha, no discuten nunca, no se
hechan nada en cara, se hablan, se dicen cosas, todos se escuchan.
Este equipo tiene otro parecido con los uruguayos, la garra…
Yo siempre digo que la
satisfacción que te deja un triunfo, es similar a la sensación después de tener
una buena noche de sexo y una vez que probas eso, te gusta y lo querés siempre
y acá a todos nos gusta ganar. El hecho de que seamos amigos y a todos nos
guste ganar hace que dejemos todo para eso. No pasa por la camiseta, ni por la
plata, nos gusta ganar y vamos para adelante y nos rompemos el alma para no
perder. El que nos gane se va a tener que matarnos para conseguirlo, no nos va a
ganar nadie.
Todo lo que decís da a entender que el trabajo del jugador no termina
dentro de la cancha…
Tiene que ver con un tema de
valores. Vos podés comprometerte más o
menos con un proyecto y en función de cuanto amor le pongas a las cosas, van a
salir de una forma u otra.
Esto es lo que más me gusta en
mi vida y cuando me siento bien doy todo, y yo acá me siento mejor que en
ningún club. Sin desmerecer a los otros por los que pase, pero es la primera
vez que me pasa que se combina la calidad humana, la calidad de juego y la
calidad del entorno y en ese clima no concibo otra cosa que dar todo, y darlo
todo implica contribuir en un buen asado si nos juntamos a comer, que el clima
siempre sea el mejor posible o dar una nota, y eso a la larga se nota en los
resultados.
¿Cómo ves a nivel general el basquetbol del club?
Lo veo creciendo. Veo que hay
mucho por mejorar, pero que hay muy buenas intenciones y mucha gente trabajando
con inteligencia y entiendo que las personas que están atrás de esto, Hernan
(Lewin, dirigente del básquet de Temperley), Jorge Rodriguez Turdó, Mariano
Nóbile (entrenador de la primera) que también se sumó ahora, son gente que hace
las cosas con seriedad, trabajando en un proyecto a futuro. Se está haciendo un
trabajo muy importante en inferiores y ese es el secreto. Tenemos que mirar
como ejemplo a Pedro Echagüe, que vendría a ser como Lanús en el futbol. Tiene
casi la totalidad de su plantel de primera integrado por hombres que salieron
de las inferiores. Nosotros tenemos que lograr tener un plantel de primera
formado íntegramente por jugadores de las inferiores, y yo creo que se puede,
si se trabaja a largo plazo.
Los jugadores actuales de inferiores, ¿sirven como recambio o todavía
les cuesta adaptarse al nivel?
La realidad es que salvo
Aguirre, que viene de un nivel superior, al resto se nota que les falta.
Hay muchos conceptos que
manejamos que, en Temperley, nunca se habían trabajado y se nota, pero también
hay buenos jugadores que poseen potencial y tienen que entender que tienen que
trabajar mucho para poder ponerse a una altura que les permita jugar en
primera. Sobre todo pensando en que el proyecto apunta a que Temperley vaya
para arriba y llegue a jugar Liga Nacional.
¿Jugar Liga Nacional no es utópico para este momento?
No, este momento sería un paso
lógico para llegar a los niveles nacionales. Trabajando seriamente se puede.
Villa Mitre, de Capital, era un
equipo que tenía cancha de baldosas y de dimensiones no reglamentarias y los
tipos apostaron y apostaron y están jugando Liga B con una pista adecuada. Yo
creo que se puede, es cuestión de proponérselo y trabajar seriamente.
¿Sólo trabajo o tiene que haber un apoyo económico exterior?
Por supuesto que es
imprescindible contar con un apoyo económico, sino es muy difícil, por lo menos
en esos niveles. En la Liga
necesitas viajar, pagar hoteles, micros, tener jugadores full time, por lo que
obviamente tienen que percibir un sueldo.
De lo que si estoy seguro es
que con un buen proyecto de trabajo que de buenos resultados, en un club con la
convocatoria que tiene Temperley, el apoyo económico aparece.
¿Por qué Temperley debe ascender?
Por todo lo que te dije antes y
porque somos los mejores.
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