Posted by :
Manuel Rodriguez
13 dic 2011
TEMPERLEY 75 - 58 WILDE SPORTING
Con el Microestadio a tope y una gran fiesta en las tribunas, Temperley consiguió el ascenso a la Primera A, tras derrotar a Wilde por 75 a 68 en un partido emotivo que tuvo todos los condimentos de una final. Crónica de un equipo que siempre entregó el máximo, nunca bajo los brazos y hoy puede festejar. Salud.
Si en los dos partidos anteriores de la serie el marco fue estupendo, el de ayer era inigualable. La derrota en Wilde no amedrentó al público Gasolero, que se triplicó en las tribunas.
El ruido ensordecedor ya colocaba en clima a los jugadores, cuando estos realizaban el pre calentamiento. Ambos conjuntos con la misma idea: Ganar. Ya no importaba la posición en la fase regular, ni el resultado de los dos encuentros anteriores, el que valía era éste y había que ganar como sea.
Por suerte, mejor dicho, gracias al trabajo de todo el plantel el que festejó fue Temperley. Y vaya si lo merecía.
El cotejo comenzó con varias fallas en los dos equipos. La imprecisión de cara al aro se hizo presente en el arranque hasta que por fin, cuando se había jugado ya más de un minuto y medio, Matías Fenández pudo borrar el cero del marcador sumando los primeros dos puntos y augurando lo que sería una inmensa producción ofensiva personal. Luego, un libre de Marcelo Villani y otro doble de Fernández alejaron aun más al Cele.
La defensa planteada por Wilde, una personal muy cerrada bajo el aro, obstaculizó la capacidad anotadora del local, que volvió a estar errático, y posibilitó un acercamiento del team del Partido de Avellaneda que no merecía, pero nuevamente apareció La Torre para poner las cosas en su lugar, dándose el lujo de anotar un triple (Después marcaría otro en el tercer cuarto), y cerrar el primer cuarto ganando por 10 a 5.
En el segundo parcial, el equipo que dirige Mariano Nóbile se sintió más cómodo. Apoyados en una intensa defensa, repartiendo su goleo y atacando con dos bombazos (Uno de Juan Pereyra y otro de Lucas Viva) en momentos exactos, Temperley iniciaba el tramo final del camino hacia la gloria de la Primera A, con la que tanto había soñado. Sumando desde la línea de tiros libres y con Julián Aguirre y Pereyra ayudando en la base a un Alejandro Eiguren disminuido físicamente por una lesión, el Gasolero se iba al descanso con un tanteador de 28 a 17 que daba una cierta tranquilidad.
El tercer período encontró a un Sporting que intentó con todas sus armas acortar distancias. Pero la defensa de los capitaneados por Javier Madero y la dosificación justa para convertir en ataque, sobretodo por medio de Fernández y del Torito Aguirre, permitieron mantener la diferencia.
El punto a punto,sin embargo, terminó beneficiando a los visitantes que, con un parcial de 20 a 17 (Sostenido en los tantos de Mendyk y Cepeda), pudo acortar distancias ( 45 a 37) haciendo más picante el último cuarto.
Cabe destacar en este segmento la gran tarea del Santa, Juan Pereyra que, frente al agravamiento de la lesión de Eiguren, debió hacerse cargo de la base en un pasaje caliente del partido y no le tembló el pulso a la hora de ser el estratega dentro del terreno.
Los diez minutos finales definían el trabajo de todo un año, cualquier cosa podía pasar. Atrás quedaban las victorias agonicas ante San Lorenzo, la primera ronda de Playoffs contra Harrods, el triunfo en Berazategui. Un puñado de minutos decretarían o no el ascenso del Celeste.
Wilde, decidido a jugarse el todo por el todo, arremetió contra el Gasolero y redució aún más la ventaja colocándose a sólo seis tantos (47-41), no obstante un doble de Villani y un triplazo de Javier Madero volvieron a darle aire a Temperley y levantaron al público.
De ahí en más, el nerviosismo y la cantidad de faltas cometidas, llevó el encuentro a las líneas de libres, desde donde el equipo del Partido de Lomas de Zamora logró mantener los 11 puntos de luz.
Con casi dos minutos y medio para el cierre, los visitantes, salieron a quemar las naves y el Cele lo aprovechó con categoría, sacando una mayor diferencia.
Los últimos segundo fueron pura emoción. Al sonido espectacular de las gradas se le sumó el de los jugadores suplentes. Los abrazos comenzaron hacerse protagonistas de la historia, tanto dentro como fuera del parquet. Las sonrisas de los jugadores se contagiaron en los rostros de la gente que invadió la cancha tras el final. A nadie le importó el resultado, 75 a 58, lo importante fue gritar "El Cele se va de la B..."
Un festejo inolvidable que quedara en las retinas de todos los amantes del deporte de la naranja que saben lo que es ponerse la celeste.
Después de lo obtenido, la fiesta no podía cerrarse sin un asado para los jugadores, cuerpo técnico, dirigentes y allegados, donde cada uno dedicó unas palabras y continuaron los cánticos.
Ascenso y Gloria para estos leones que vistieron con honor la camiseta durante todo el año. Una nueva página de exitos se escribe a fuego en un libro que cuenta con mucho espacio en blanco, pero que hay con que llenar.
La Palabra de los Protagonistas:
Ficha:
Si en los dos partidos anteriores de la serie el marco fue estupendo, el de ayer era inigualable. La derrota en Wilde no amedrentó al público Gasolero, que se triplicó en las tribunas.
El ruido ensordecedor ya colocaba en clima a los jugadores, cuando estos realizaban el pre calentamiento. Ambos conjuntos con la misma idea: Ganar. Ya no importaba la posición en la fase regular, ni el resultado de los dos encuentros anteriores, el que valía era éste y había que ganar como sea.
Por suerte, mejor dicho, gracias al trabajo de todo el plantel el que festejó fue Temperley. Y vaya si lo merecía.
El cotejo comenzó con varias fallas en los dos equipos. La imprecisión de cara al aro se hizo presente en el arranque hasta que por fin, cuando se había jugado ya más de un minuto y medio, Matías Fenández pudo borrar el cero del marcador sumando los primeros dos puntos y augurando lo que sería una inmensa producción ofensiva personal. Luego, un libre de Marcelo Villani y otro doble de Fernández alejaron aun más al Cele.
La defensa de Temperley fue clave. |
En el segundo parcial, el equipo que dirige Mariano Nóbile se sintió más cómodo. Apoyados en una intensa defensa, repartiendo su goleo y atacando con dos bombazos (Uno de Juan Pereyra y otro de Lucas Viva) en momentos exactos, Temperley iniciaba el tramo final del camino hacia la gloria de la Primera A, con la que tanto había soñado. Sumando desde la línea de tiros libres y con Julián Aguirre y Pereyra ayudando en la base a un Alejandro Eiguren disminuido físicamente por una lesión, el Gasolero se iba al descanso con un tanteador de 28 a 17 que daba una cierta tranquilidad.
Eiguren y Pereyra se abrazan. Juancito se encargó de suplantar a Ale de la mejor manera. |
El punto a punto,sin embargo, terminó beneficiando a los visitantes que, con un parcial de 20 a 17 (Sostenido en los tantos de Mendyk y Cepeda), pudo acortar distancias ( 45 a 37) haciendo más picante el último cuarto.
Cabe destacar en este segmento la gran tarea del Santa, Juan Pereyra que, frente al agravamiento de la lesión de Eiguren, debió hacerse cargo de la base en un pasaje caliente del partido y no le tembló el pulso a la hora de ser el estratega dentro del terreno.
La felicidad de Ale Eiguren, quien los últimos partidos jugó infiltrado |
Wilde, decidido a jugarse el todo por el todo, arremetió contra el Gasolero y redució aún más la ventaja colocándose a sólo seis tantos (47-41), no obstante un doble de Villani y un triplazo de Javier Madero volvieron a darle aire a Temperley y levantaron al público.
Mariano Nóbile, el Dt detrás del exito. |
Con casi dos minutos y medio para el cierre, los visitantes, salieron a quemar las naves y el Cele lo aprovechó con categoría, sacando una mayor diferencia.
Los últimos segundo fueron pura emoción. Al sonido espectacular de las gradas se le sumó el de los jugadores suplentes. Los abrazos comenzaron hacerse protagonistas de la historia, tanto dentro como fuera del parquet. Las sonrisas de los jugadores se contagiaron en los rostros de la gente que invadió la cancha tras el final. A nadie le importó el resultado, 75 a 58, lo importante fue gritar "El Cele se va de la B..."
Abrazos. Villani, Fernández, Madero y González rodeados del público gasolero |
Después de lo obtenido, la fiesta no podía cerrarse sin un asado para los jugadores, cuerpo técnico, dirigentes y allegados, donde cada uno dedicó unas palabras y continuaron los cánticos.
La cena también tuvo cantitos y festejo |
La Palabra de los Protagonistas:
Ficha:
4- Juan Pereyra ★
5- Eduardo Martin
19- Lucas Viva
19- Lucas Viva
7- Matías Fernandez ★
8- Tomás Cnochaert
8- Tomás Cnochaert
9- Julián Aguirre
10- Sergio Pallavicini
11- Juan Martín Huss
12- Alejandro Eiguren
13- Marcelo Villani
11- Juan Martín Huss
12- Alejandro Eiguren
13- Marcelo Villani
14- Javier Madero (C)
15- Santiago Fossatti
15- Santiago Fossatti
Dt Mariano Nóbile
As1 Juan Veira
As2 Leonardo Costa
Pf Mauro Nuñez
K Gonzalo Campelo
Pf Mauro Nuñez
K Gonzalo Campelo