Más allá de la excelente primera mitad de año, el Gasolero, debía reafirmar su potencial. La Zona Campeonato dejó atrás los triunfos de la primera rueda, más aún la única derrota, sólo importaba ganar para dejar en claro que el ascenso es el objetivo. 

Y así fue, desde el minuto cero los dirigidos por Mariano Nóbile salieron a comerse la cancha y lo reflejaron en el tablero con un rápido 8 a 0 que obligó al entrenador de Ateneo Popular de Versalles a pedir un tiempo muerto a sólo tres minutos del inicio. Sin embargo este intento por despabilarse por parte del visitante no surgió el efecto deseado y el Cele siguió su marcha aplanadora de la mano de Julián Aguirre y Alejandro Eiguren poniéndose 14 a 8 con cuatro minutos por jugar. Pero los de Versalles no cesaron en sus intentos y ,aprovechando la falta de puntería en ataque y la mala defensa del poste bajo de su rival, cerraron el cuarto 19 a 17 abajo.

 El comienzo del segundo período estuvo marcado por las imprecisiones en ambos equipos, no obstante con el transcurrir de los minutos la situación cambió rotundamente y el goleo se acrecentó, sobre todo en el conjunto local, el cual encontró la fisura defensiva del contrincante en el poste bajo, donde Tomás Cnochaert, Sergio Pallavicini y Matías Fernandez hicieron la diferencia gracias a las asistencias de Lucas Viva. De esta forma el equipo del sur tomó distancia rumbo al descanso dejando el encuentro en 41 a 29.

Tras el entretiempo los Gasoleros supieron aumentar la ventaja por medio de un Aguirre imparable que supo capitalizar las oportunidades de ataque y llevar al Temperley a un claro 63 a 42.

A pesar de tener el cotejo dominado desde el tercer período, Eiguren y compañía no bajaron la intensidad y siguieron ampliando la brecha de puntos mientras el "ole" bajaba de las tribunas. Aprovechando la supremacía el DT Celeste le dio minutos a los jugadores de inferiores, produciendo el debut en la categoría del Cadete Juan Vazquez, uno de los proyectos basquetbolisticos más importantes del club.